Bandas de viento en la Ciudad de México. Espacio sonoro, memoria y expresiones religiosas indígenas
La Mtra. Adriana Aguayo Ayala de una Universidad Autónoma de México realizó esta investigación publicado en el libro Caminando en los espacios de la memoria y lo comparte para las comunidades indígenas en la ciudad de México.
Desde la década de 1950, ayuuks originarios de Santa María Tlahuitoltepec y zapotecos de San Baltazar Yatzachi el Alto, migraron a la Ciudad de México para continuar sus estudios o en busca de trabajo. Estos grupos se asentaron en la urbe y entre sus miembros se encuentran hasta dos generaciones de indígenas que nacieron en la ciudad, aunque en la actualidad algunos individuos y familias siguen migrando desde las comunidades de origen tanto a la Ciudad de México, como a algunos municipios del Estado de México y algunas localidades de Estados Unidos. Tanto para los ayuuks como para los zapotecos de la Sierra Norte de Oaxaca, la música es un elemento fundamental de su universo simbólico y forma parte indispensable de distintos momentos en la vida comunitaria, especialmente en las fiestas religiosas y en diversos momentos rituales.
El objetivo de este texto es acercarnos a la manera en que miembros de estas dos comunidades indígenas procedentes de Oaxaca producen y reproducen en la Ciudad de México tradiciones de sus comunidades de origen, lo que les permite reforzar su identidad y fortalecer sus lazos comunitarios en la ciudad, tanto con la comunidad de origen como con otros miembros establecidos en otros estados del país o en localidades de Estados Unidos. Sostenemos la hipótesis de que la formación de bandas de música en el contexto migratorio puede ser entendida como una acción encaminada no sólo al reforzamiento de su identidad en la ciudad y de contacto con la comunidad de origen, sino también como un proceso de retorritorialización al extender el espacio sonoro y comunitario en un contexto de movilidad.
Deja una respuesta